1) Formar un equipo de profesores voluntarios que hayan recibido la formación adecuada. Jóvenes directores artísticos participan en la creación de producciones y enseñan a los participantes los conceptos básicos de coreografía, habilidades escénicas y ritmo.
2) Crear equipos creativos inclusivos que desarrollen actividades conjuntos y preparen actuaciones. Las actividades se realizan en diferentes direcciones: baile, canto, lectura de poesía, voz, actuación.
3) Organizar actividades de conciertos de grupos creativos inclusivos en los sitios de los Palacios de la Cultura. Familias y amigos de artistas jóvenes, activistas de organizaciones juveniles, representantes de organismos gubernamentales son espectadores.
4) Abrir las “casas de Vita”, en las que los niños con necesidades especiales podrán realizar actividades creativas de forma permanente. Los espacios se proponen sin cargo por parte de los gobiernos locales, las actividades actuales se proporcionan sobre una base de subvención y patrocinio.